El pasado domingo 13 de noviembre el cardenal Carlos Osoro bendijo esta obra durante la inauguración de la capilla en la Catedral de la Almudena.
La capilla, diseñada por el estudio de arquitectura Cano y Escario, emplea la madera como base del proyecto en referencia al amor de San Juan Pablo II por la Naturaleza y las montañas. Los arquitectos confiaron hace meses en nuestro equipo de técnicos y profesionales de la madera para el desarrollo de las soluciones constructivas, fabricación y montaje de toda la estructura de carpintería.
El cedro cedrela odorata, la especie elegida por nuestro equipo, es sin duda el elemento principal. Ha logrado envolver con su textura y olor dicho espacio de oración y penitencia, una experiencia notoria durante la inauguración de la capilla.
Grupo Gubia y la estructura de madera de cedro
Cincuenta pórticos de madera de cedro conforman el espacio, cada uno de ellos con alturas y geometrías diversas. Estos elementos van desde los 6 a los 13 metros de altura. Más de 1250ml de madera labrados en escuadrías colocados con una separación de 150 mm entre eje, dejan entrever la piedra original de la capilla.
«Durante casi tres meses las mesas del estudio han estado llenas de planos de producción, detalles de encuentros, despieces de madera… Y nuestro taller impregnado de ese olor a cedro tan particular que, hoy envuelve este espacio dedicado a San Juan Pablo II en la Catedral de La Almudena» comenta Verónica Sancho, arquitecto jefe del departamento técnico de Grupo GUBIA.
Elementos singulares de madera de cedro
La parte baja de algunos de los pórticos de madera quiebran dando forma a figuras geométricas que recuerdan una arboleda. De esta manera se crean hornacinas que albergan imágenes retroiluminadas con escenas de la vida de San Juan Pablo II. Cuatro de los pórticos se mecanizan en toda su longitud para embutir tiras de led, que crean distintas escenas de luces dentro del espacio.
Situado en el extremo, la capilla cuenta con un confesionario realizado con la misma estructura de listones, lo que le da su carácter penitencial.
Una nueva experiencia construida con madera
La escala del proyecto, lo que representa a nivel espiritual y su singular ubicación en la Catedral de la Almudena han supuesto una nueva experiencia para todo el equipo de Grupo GUBIA. Las piezas de madera, cuidadosamente labradas, han ido montándose en el taller con mucho mimo.
«El pre-montaje en taller de esta macroestructura de madera de cedro ha permitido evitar problemas e improvisaciones en obra. Esto ha minimizado los tiempos de montaje finalizando los trabajos incluso con una semana de antelación» apostilla Pepe Castro, jefe de producción.
Se trata sin duda de uno de los proyectos de arquitectura con madera más gratificantes en los que hemos participado y a la vista su resultado.
Pueden verse más imágenes de la inauguración aquí.
